viernes, 5 de junio de 2015

Fwd: historia despido blog



1º: ¿Cuando te despidieron, hubo plazo de preaviso?
Sí, me dieron 15 días

2º: ¿Por qué motivo te despidieron?
Por no querer trabajar los festivos, sin ningún tipo de remuneración.

3º: ¿Hubo más despedidos  junto a ti?
No, solo el mío

4º: ¿Recibiste algún tipo de indemnización por parte de la empresa?
Sí, lo que me pertenecía

5º: ¿Acudiste al SMAC para solicitar el acto de conciliación?
No

6º: ¿Te pagaron correctamente todo lo que te debían en el finiquito?
Sí, pero me descontaron el día festivo por no ir a trabajar de mis vacaciones

7º: ¿Tienes pensado buscar otro trabajo o montar una empresa en un futuro cercano?
 Por ahora encontrar otro trabajo.

Guillermo Carrilero. SMR1A

viernes, 29 de mayo de 2015

Despido Colectivo


Despido colectivo (ERE)


Causas del despido:

Cierre de la empresa, ya que la querían traspasar a Francia porque la jefa era francesa. La empresa estaba compuesta por unas quince personas aproximadamente, que se componía en oficina donde había unas cinco personas y de almacén que eran diez.


¿Os avisaron con quince días de margen?

Sí, nos reunieron a todos los empleados, en esta estaban también la jefa y algunos directores franceses. Estos hicieron un ERE, un despido colectivo. Despidieron a todos los del almacén, en esos días, desde la reunión hasta el último día de trabajo, se encargaron de organizar todo el almacén para que no se quedase nada en la nave, ya que la empresa se dedicaba a vender a toda España y Francia productos para animales. Mientras tanto los de contabilidad y administración estuvieron un más para poder terminar de facturar todo. Yo era de contabilidad.


¿Te dieron finiquito?

Sí, nos dieron el dinero que nos correspondía, el dinero de las pagas, vacaciones…


Óscar Rodríguez Zahonero 1ºASIR

martes, 26 de mayo de 2015

DEL DESPIDO A EMPRENDER

Esto comenzó hace unos 9 años más o menos, después de haber estado prácticamente toda mi vida trabajando en una empresa importante de ascensores me echaron. Mi empresa iba genial pero todo comenzó a ir mal en el comienzo de la crisis, mi jefe iba echando a los trabajadores poco a poco hasta ser yo uno de los últimos ya que no pedían trabajo y la empresa iba quebrando poco a poco. No me lo creía ya que era fijo pero bueno la cosa no era estar estancado ya que mi familia tenía que comer y con el sueldo de mi mujer no daba para mucho ya que el sector de la limpieza no da para comer a mis dos hijos mi mujer y yo. Fue muy duro ese despido ya que yo en mi curriculum no tengo otra cosa que sea trabajar en esa empresa de ascensores.
Con la indemnización y el paro que tenía podríamos sobrevivir más o menos pero eso se iba agotando con el tiempo. Mis dos hijos estudiando (uno de 20 y otro de 8) tenia que sacar dinero para sus estudios pero no encontraba trabajo, ya que era muy mayor o querían más experiencia cosa que yo no tenía. Durante unos 4 años no trabajé solo echaba currículum y hacía chapuzas ya que soy muy manitas y no se me dan nada mal trabajar con las manos y darle vueltas a la cabeza para hacer mi trabajo más sencillo, pero no me servía de mucho ya que no me salían muchas chapuzas.
Ya viendo que todo se me echaba encima, el seguro del coche, la letra del coche, gastos de la casa… decidí montar una ferretería, pero necesitaba un operario ya que yo solo no podía con todo y mi hijo decidió dejar de estudiar para venirse conmigo a trabajar, pero tenía que tenerle ilegalmente, ya que si no tengo dinero para mi menos para pagar un sueldo a mi hijo.
Con el poco dinero que tenía compré un local y decidí montarlo yo porque llamar a unos operarios me salía más caro, además yo tenía un poco de idea de carpintería y entre mi hijo y yo estaba seguro que podríamos. Fue un trabajo laborioso y costoso pero al cabo de los meses logré tener la tienda lista con productos y con nombre propio. Para comenzar la apertura de la tienda eché en los buzones propaganda de mi apertura, mis horarios y de mis productos.
Con el tiempo veía que necesitaba meter más productos en la tienda ya que al principio metí pocos, pero por falta de dinero no podía y recurrí a vender la plaza de garaje, quitar el teléfono fijo y demás cosas que podía prescindir de ellas, pero con eso no cubría todo lo que necesitaba entonces recurrí a familiares para pedirles un préstamo y ellos me lo dieron. Yo mes a mes metía más y más productos pero veía que no sacaba mucho adelante. Entonces decidí aumentar mi negocio y mientras que mi hijo estaba en la tienda yo iba a hacer chapuzas tanto de arreglar una simple puerta hasta hacer presupuestos a portales para pintarles el portal. Esas chapuzas nos salvaban mes a mes de poder comer y pagar las facturas porque la tienda no funcionaba. No todos los meses tenía chapuzas lo cual debía al banco luz, gas… algún mes, y comenzaron mis deudas tanto con el banco como con la familia, y tuve que pedir la herencia adelantada a mi suegra, eso no fue nada fácil pero lo necesitaba o sino tendría que cerrar la tienda cosa que me lo planteé mas de alguna vez, pero mi hijo no quería ya que si la vendíamos no nos quedaba nada de dinero solo el sueldo de mi mujer y pagar bastantes deudas.
Actualmente llevo 5 años con la ferretería abierta y según el mes puedo sacar más o menos dinero pero las deudas siguen estando y el banco me ahoga. Trabajo absolutamente todos los días desde bien pronto para tener todo a punto para la tienda y estamos hasta última hora con la esperanza que entre algún cliente.
Es difícil dormir con este mal estar de ver que no llegas para dar de comer a tu familia pero es lo que actualmente hay en este país y me toca seguir luchando día a día.

Óscar. 1SMRA. IES Luis Braille



viernes, 22 de mayo de 2015

Entrevista a un despedido

1º- ¿Cuándo te despidieron hubo plazo de preaviso?
-         Sí, me avisaron, aproximadamente 15 días antes del despido.

2º- ¿Por qué te despidieron?
-         En la carta de despido decían que se reducen los costes de personal por una situación económica negativa.

3º- ¿Cuántos despedidos hubo junto a ti?
-         Contandome a mí fuimos 3 despidos en total.

4º- ¿Recibiste algún tipo de indemnización por parte de la empresa?
-         Sí, claro, recibí un total 45 días de salario por año trabajado, ya que estuve trabajando aproximadamente un año con ellos.

5º- ¿Acudiste al SMAC para solicitar el acto de conciliación?
-         No, me centre más en buscar un trabajo nuevo ya que era una etapa en la que necesitaba dinero urgentemente.

6º- ¿Te pagaron todo lo que te debían en el finiquito?
-         Sí, no me puedo quejar, me pagaron todo lo  que me debían.

I.E.S. Luis Braille - Alin Bogdan Voinea 

Despido de todos los empleados


Hace unos años todo iba bien. La empresa era grande y había  tanto trabajo que podíamos hacer horas extras, pero eso era hace años...

Cuando cumplí los 14 años y terminé los estudios básicos empecé a trabajar como carpintero en la empresa que tenía un vecino y ahora que tengo 51, y mujer y 2 hijos me veo en el paro.

Llevábamos unos meses en los que había pocos clientes que quisieran nuestros servicios y mi jefe empezaba a temer ciertas perdidas. Esas perdidas provocaron deudas que mi jefe decía que no podía asumir, incluso a veces se retrasaba a la hora de pagar nuestros salarios.

Estando en esta situación intentamos aguantar unos meses pero esas deudas iban aumentando a tal punto que ni siquiera los proveedores nos querían servir sus productos y no podíamos avanzar en los trabajos que teníamos empezados.

El jefe nos dijo que se estaba planteando cerrar la empresa y despedirnos a mi y a su hijo que eramos los únicos empleados que quedábamos en la plantilla. Nos pedía perdón y nos prometía que iba a pagarnos todos los salarios atrasados.

Como ya he dicho tengo 51 años y toda la vida la he dedicado a trabajar de lo mismo y no tenía ni idea de mis derechos. Por suerte mi jefe pidió que viniera un abogado laboralista que nos explicó todo lo que iba a pasar e incluso nos dijo  la indemnización que nos correspondía y como acudir a la oficina de empleo para poder cobrar la prestación por desempleo.

El abogado nos dijo que el cierre de la empresa sería en unos meses, nos daban de margen el tiempo que tardásemos en terminar un par de trabajos que teníamos pendientes y bueno.. así fue. Cuando pasaron tres semanas aproximadamente ya habíamos acabado el trabajo y no había nada más que hacer así que se empezaron a tramitar nuestros despidos.

En todo momento creo que estuve bien informado de todo lo que iba a pasar y de cuáles eran mis derechos. Ni siquiera tuvimos que efectuar ningún tipo de reclamación en el SMAC ni en ningún sitio puesto que nuestro jefe hizo todo lo posible para que saliéramos perjudicados lo mínimo. De hecho estoy cobrando el paro y se me está pagando la indemnización por todos los años que trabajé antes del despido que era el tema que más me preocupaba.

Esos son los únicos ingresos que hay en mi familia puesto que mi esposa está en mi misma situación y mis hijos ambos son estudiantes.

Solo espero encontrar pronto un trabajo que nos proporcione la estabilidad y seguridad que había en mi familia y que nadie cerca de mi pase por situaciones difíciles. Solo quiero volver a llegar a casa de noche, con el cuerpo lleno de serrín y cansado pero sabiendo que mi familia no va a tener ningún tipo de carencias.

C. A. 1SMRA. IES Luis Braille

jueves, 21 de mayo de 2015

Dificultad Financiera: López S.A.

Situación real: se trata de un hecho inventado, basado en la una situación similar, que le sucedió al amigo, del amigo, de un amigo…

 LÓPEZ S.A.

Fuente: Wikimedia Commons
Durante aquella mañana la familia López se disponía a prepararse para las labores diarias  igual que cada mañana ,solo que ésta no era una mañana cualquiera, el día se tornaba soleado y el cielo se mostraba azul, era mediados de mayo  y aun estaba preparándome para ir al trabajo, sin tener presente de ninguna forma la situación en la que se encontraba mi familia … Todo se remonta a hace 5 años, somos gaditanos, mi padre poseía una pequeña empresa que le proveía de muchos recursos, como mi madre tenía experiencia desde que era niña en la hostelería, concretamente en el sector de pastelería, mi padre invirtió vendiendo el 40% de las acciones de su empresa y con este dinero montó un negocio dedicado a la pastelería, el cual, dirigía mi madre y con mucho esfuerzo y dedicación pudo poco a poco salir adelante. Tras dos años de avance muy lento pero continuo, se pudo recuperar la inversión de papá y empezar a ver  beneficios provenientes de esto. Mientras tanto la empresa de papá se extendía y al parecer ganaba mucho dinero y nuestra situación económica era bastante buena, vivíamos en un chalet cerca del centro y, en fin, no me puedo quejar era una chica feliz.
Pocos meses después acabé el instituto y empecé a ir a la universidad lo cual me alegraba mucho y además  hacía lo que mas me gusta, estudiar, el negocio de mamá seguía su rumbo, cada vez sus clientes eran mas seguros, a la vez que día a día aumentaba uno, dos o diez clientes. A veces, al salir de la universidad pasaba con mis amigas a tomar un café y galletitas o desayunaba con papá, cuando no estaba
hablando por teléfono, hablando por el ordenador, trabajando, pensando en trabajo ,vamos, casi nunca, pero así son los hombres de negocios y yo lo entiendo. Teniendo en cuenta lo bien que estábamos y con el gran esfuerzo de ambos, decidieron mudarse a un piso más bonito y más lujoso. Tras un año viviendo en la casa nueva, yo ya había terminado mi primer año de carrera, pero bueno, aun tenía cuatro más por delante y los iba a disfrutar para salir de ésta siendo la mejor. Con el paso de los días dejé de ver a papá, por motivos de trabajo no asistía a la cena diaria, que era prácticamente el único momento del día en el que podía verlo, aunque esto no me garantizaba mantener una conversación. Pregunté a mamá si sabía qué pasaba y pero no lo sabía, que suponía que era por cuestiones de trabajo, quizá estaba en algún gran proyecto o tal vez le surgió una reunión de imprevisto ,el caso es que mi madre no se preocupaba de nada, ni había de que preocuparse según ella.
Pocas semanas después mi padre se encontraba en el comedor, era ciertamente extraño pero mamá y yo no éramos conscientes de lo que se avecinaba, nos sentamos en la mesa y tras observarlo y notar en su rostro algo extraño le pregunté: -Papá  ¿Te pasa algo? ¿Hay algo que pueda hacer por ti?, ¿Hay algo que nos quieras contar?… - y su respuesta no se hizo esperar, me dijo: -Cariño por cosas de la vida , situaciones, momentos, pensamientos, a veces nos estrellamos contra el suelo y no hay vuelta atrás.- El miedo y la tristeza se reflejaban en el rostro de mi madre mientras yo miraba absorta sin dar crédito a lo que oía, sin saber de qué me hablaba, -resulta que con la intención de invertir mas, ampliar y expandir López S.A. vendí parte de la empresa y por cosas del destino fue lo mas estúpido que he podido hacer nunca, no sé cómo miraros a la cara, pero tenía que decirlo, he perdido casi el 41% del 60% de las acciones que tenía.
Además tengo deudas a las cuales no podré hacer frente sin los ingresos de los que disponía, y me temo que no sé qué hacer, me paso los días en la oficina día y noche sin dormir y no veo ninguna solución.
De hecho tendremos que dejar esta casa e irnos a otro sitio muy diferente de lo que estáis acostumbradas. - Mamá me miró asombrada sin dar crédito a lo que acabábamos de oír, pero era muy serio, yo no sabía que decir ni pensar, no sabía cómo, cuándo, ni por qué sucedía esto y aunque sabía que era muy serio,  no me imaginaba la magnitud total del problema.
En consecuencia nos volvimos a mudar de casa, aunque a mamá le iba bien en su pastelería, no podía hacer frente a los gastos, y tuvo que venderla.
Con ese dinero papá pagó algo de lo que debía, pero era totalmente insuficiente, nos trasladamos a Madrid, a casa de un tío que vive en Francia, era un piso pequeño, de 60 metros cuadrados, eso medía mi habitación anterior… mi madre se quedó
EZ S.A.﷽﷽A: LOPELIA LÓpr a papa ntinuar preparandome er algo de dinero a casa y por supuesto ahorrar para que algun papa a sali en paro y mi padre consiguió un trabajo realizando el papeleo de una empresa de seguros.
Yo he tenido que dejar la Universidad, seguramente más adelante retomaré mi carrera, pero ahora mismo intento ayudar a papá a salir adelante, y trabajo de camarera en dos bares para traer algo de dinero a casa y por supuesto ahorrar para que algún día tan soleado como hoy pueda continuar preparándome para ser pediatra.

Bryan Vargas Salazar 
Curso: 1ºP
I.E.S. Santa Teresa de Jesús

miércoles, 20 de mayo de 2015

Despido Colectivo en la Playa de Madrid

Trabaja en la Playa de Madrid que hace poco la cerraron porque el Jefe que era Arturo Fernández debía mucho dinero y al no poder pagar la deuda cerraron la Playa de Madrid dejando a muchos trabajadores en la calle. Este empresario que era jefe del grupo Cantoblanco estuvo también implicado con las taqrjetas Black
 Plazo de Preaviso.
 El empresario no comunicó a ninguno de los empleados que se iban a quedar sin trabajo. En el mismo día del despido la policía apareció por las instalaciones de la empresa y les dijo a los empleados presentes, que tenían una orden de desahucio y debían de interrumpir lo que estaban haciendo en ese instante y abandonar sus puestos de trabajo.
 Finiquito
 No.
 Tipo de despido
 Se trató de un despido colectivo por quiebra económica.
Recibió Carta de Despido.
 No le ha llegado la carta de despido hasta que no han transcurrido más de cinco meses desde el último día que acudí a trabajar. Por consiguiente he empezado a cobrar la prestación por desempleo cinco meses después del despido.
 Indemnización.
 Hasta día de hoy no ha podido cobrar mi indemnización. El empresario tiene tantas deudas con sus empleados que sostiene que no puede abonar las indemnizaciones correspondientes a cada empleado. Por ello se lo tendrá que abonar FOGASA (Fondo de Garantía Salarial) aunque no todo, solo una parte de lo que me corresponde puesto en que la empresa no puede al estar en bancarrota.
 ¿Fue al SMAC?
 Si tuvo que acudir al SMAC. En primer lugar, al demorarse la entrega de su carta de despido, acudió a un abogado sindicalista de UGT para poner una denuncia a mi empresa. Tras eso, le dieron cita para acudir a un juicio de reconciliación al cual fue con su abogado. No obstante ni el empresario ni el abogado del empresario se personaron en la cita.
Tuvo que ir a Juicio
 No. 

IES Luis Braille

1ºSMRB Diego Ruiz Morato

Fuente de la imagen: Wikimedia Commons

martes, 19 de mayo de 2015

Organización sindical y despido

Santiago era trabajador de PZ en Valladolid pero fue despedido por impulsar un proceso de organización sindical en esta empresa y promover huelgas sobre las condiciones del trabajo. Es un joven de 22 años con un salario ridículo como todos los que paga esa empresa a sus trabajadores. Pertenece al sindicato SND que está iniciando una campaña para que sea readmitido y por el derecho a la organización sindical en la empresa.

Cuéntame cómo empezó todo. ¿Cómo y porqué fuiste despedido?

Llevaba trabajando 2 años en la empresa como auxiliar de tienda. Me entregaron una carta de despido en la que decía que era poco productivo, lo cual es completamente falso. Eso es observable en las hojas de productividad que tiene la empresa en las que se puede ver lo contrario. Vamos, ellos mismos declaraban el despido improcedente.
La razón verdadera es otra. La jefa y el subjefe de tienda me encerraron en su despacho para aclararme personalmente que no iban a permitir que ningún trabajador hablase mal del Convenio Colectivo y que menos aún lo hiciese con el resto de los compañeros y tratara de organizarlos para impulsar un Comité de Empresa. Decidieron despedirme después de que se enfriaran las cosas tras una larga huelga que realizamos. Pensaban que dejándome al margen los demás no se organizarían.

¿Qué tipo de empresa es PZ? ¿Cuál es el perfil de los trabajadores que contratan?

Tiene a los trabajadores con condiciones laborales miserables, y tienen grandes beneficios con ello. Estamos hablando de salarios de 250 y 350 euros. El 80% de los trabajadores tenemos menos de 25 años. No sólo hablo de estudiantes sino de jóvenes trabajadores, padres y madres de familia, que por miedo a no recibir ingresos aceptan contratos de vergüenza.

¿Cuáles son los derechos sindicales de los trabajadores ahí?

 ¿Derechos? Ninguno. Nos cambiaron de convenio sacándonos del de hostelería y entrando en el de comida a domicilio. También promocionaron categorías profesionales dentro de la empresa que dividen a los trabajadores, como por ejemplo la figura del jefe de tienda. Así es fácil evitar representación sindical o que existan comités de empresa pero que sean jefes de tienda comprados por la empresa con el puesto o jefes de recursos humanos en los que nadie confía.

¿Cuáles son los principales problemas laborales?

Por ejemplo, los repartidores no tienen motos decentes. Por no tener muchas no tienen ni dos retrovisores, ni intermitentes, y es de prever que exista casi todos los meses algún incidente grave en la carretera. A pesar de estar casi toda su jornada subidos en la moto no se les reconoce la categoría de conductor profesional, con lo que no tienen ninguna facilidad para recuperar puntos del carné. Los auxiliares tienen que hacer miles de ofertas por teléfono y eso no es compensado de ninguna manera. Se nos están reduciendo horarios, y por lo tanto sueldo. Los nuevos contratados sólo pueden trabajar 24 horas al mes, por 125 euros de salario. Sin contar además que a muchos nos obligan a trabajar fuera de nuestro horario, y bueno, un largo etcétera, que se suma a la basura del Convenio de Delivery en el que no existen pluses de nocturnidad, de festividad, de transporte, de antigüedad, de peligrosidad.

¿Qué medidas se tomaron tras conocer el despido?

Al día siguiente de mi despido decidimos organizar una concentración en la entrada de la tienda y hacer un piquete informativo para evitar que entrase gente. Entraron pocos la verdad. También contacté con el abogado de SND y empezamos a mover el caso para ir a juicio y conseguir la nulidad del despido por persecución sindical.

¿Recibiste algún apoyo?

Si, de los compañeros del sindicato, amigos, familia y otros sectores de trabajadores solidarios. Contactamos con todos los sindicatos que pudimos y me atendieron inmediatamente. Con su ayuda organizamos muchos bloqueos informativos en muchas tiendas de la misma empresa.
Me parece importante que trabajadores de sectores sin organizar pidamos ayuda a otros mejor organizados y con tradición.

¿Qué esperas conseguir?

Lo primero la readmisión. Me despidieron por luchar contra las malas condiciones del trabajo precario en esta empresa y organizarnos para defendernos. Si soy despedido significa que las posibilidades futuras de levantar un comité y mejorar las condiciones laborales y salariales de los trabajadores serán mucho menores. Lucho por la readmisión y por el derecho a organizarse y libertad de defenderse de los trabajadores.

¿Cuál es tu situación personal actualmente?

Personalmente bien porque no he estado solo ante el despido. Tengo un gran apoyo por fuera, y a la vez otro aún más importante dentro de la empresa, que solo puede expresarse clandestinamente.

¿Qué relación encuentras entre vuestra lucha y la situación más general?

La relación es muy estrecha. La situación en que nos encontramos en PZ es responsabilidad en gran parte de los mismos que han estado de brazos cruzados durante casi toda la crisis, las direcciones de CCOO y UGT. Que haya más de un 30% de trabajadores precarios en el Estado español es fruto de los años de pactos sociales. Todo esto ha ido debilitando la capacidad de organización y lucha de la clase trabajadora, empezando por los sectores más débiles, como el nuestro.

Por último, aunque en la misma entrevista ya has apuntado parte de la respuesta ¿Está condenada nuestra generación a vivir peor que nuestros padres? Es decir a ser víctima de un retroceso fortísimo y constante en nuestras condiciones de vida.

Si todo sigue en la dirección que estamos, no tengo ninguna duda de que sí. Para mí las luchas que estamos protagonizando los trabajadores hoy en día tenemos que verlas como combates de clase, que nos sirvan para ir forjando un movimiento obrero combativo. Se trata de recomponer el movimiento obrero tras años de retroceso y de dirigentes vendidos. Y al mismo tiempo los trabajadores y los jóvenes que salimos a luchar tenemos que empezar a plantearnos el problema de fondo. Si siempre pagamos los mismos es porque quienes poseen todos los medios que producen la riqueza y manejan el poder político y mediático no somos precisamente nosotros, sino una minoría parasitaria.

IES LUIS BRAILLE
D.A.G

lunes, 18 de mayo de 2015

Acuerdo en el servicio de mediación

El caso que voy a exponer trata sobre el despido de una mujer de 23 años, ex trabajadora de una Asesoría. En la que empezó a trabajar en octubre de 2013 con un contrato indefinido a tiempo parcial.

¿En que momento te avisaron del despido?

El 31 de marzo de 2015 me llamo mi jefe a su despacho, 20 minutos antes de mi hora de salida. Me comunicó que iban a prescindir de mis servicios de inmediato alegando falta de motivación e interés, por no realizar correctamente mi trabajo y por no querer coger responsabilidades, a lo que yo estaba completamente desacuerdo.

Entonces no te avisaron con el plazo mínimo de 15 días. ¿Aparecía la parte proporcional de sueldo de ese periodo?

No, porque el se acogía a que ya me fue comunicado en dos ocasiones; Una fue en el momento de mi entrevista que me comentaron que el puesto que iba a desempeñar iba a ser temporal; y la otra fue a finales de año de 2014 que me comunico que iba a ser despedida a comienzos de año, pero llegado su momento rectifico su decisión porque "No iba a poder hacer lo que pretendía hacer." (Cobrar una ayuda del gobierno por la contratación de personal joven indefinido como plan de fomento del trabajo).

En esos momentos no te dio ningún documento que demostrara legalmente tu despido. ¿Lo hizo cuando te lo comunico la última vez?

Si, me entrego mi carta de despido que constaba de 5 hojas y que pretendía que firmara sin leerla.

¿Y que hiciste?

Por supuesto no le hice caso y leí la carta que exponía los motivos que he contado anteriormente más algunos puntos como el de no revelar ninguna información relacionada con la actividad de la empresa.

¿La firmaste?

La firme, pero expuse mi inconformidad en cada una de las hojas ya que al final del documento justificaba que mi despido fuese objetivo por todos esos motivos que no eran ciertos.

¿Cuál fue la reacción de tu jefe?

Fue negativa, aunque el expresaba su descontento como un golpe personal yo creo que su verdadero motivo fue que me tenia que pagar una indemnización mayor.

Llegados a este punto de desacuerdo, ¿Fuisteis al SMAC?

Si, antes de eso firmamos un acuerdo la empresa y yo en el que aparecían los puntos en los que coincidían nuestras opiniones, horas extra, vacaciones no disfrutadas, etc. Después mi jefe se ofreció a llevar todo el papeleo correspondiente para pedir cita en el SMAC pero al final me acabo avisándome diciendo que no podía ir y me ofreció a ir yo o firmar un despido objetivo para saltarnos el paso del SMAC. Respondí afirmativamente a ir al SMAC.

¿Cuál fue la resolución del SMAC?

Por falta de pruebas por parte de la empresa ante la alegación de sus motivos, la respuesta fue positiva para mí otorgándome un despido improcedente de 33 días por año trabajado.

I.E.S. Luis Braille
J.S.R.

Despido colectivo a personas mayores

ENTREVISTA DE DESPIDO

Esta persona trabajaba en el periódico ABC.

¿Qué tipo de despido fue?
  -Un despido colectivo.

¿Tuvo alguna indemnización?
  -El finiquito correspondiente y una indemnización que el sindicato, trabajador por trabajador, les dio a elegir si pagarles año a año o de golpe. En este caso elegí año por año.

¿Cuáles fueron las causas del despido?
  -El despido fue un tanto ilegal. La empresa alegó que habían bajado las ventas para prescindir de parte de la plantilla y echaron a las personas mayores de 50 años o los cumpliesen ese mismo año.
  En realidad no bajaron las ventas, lo único que querían era quitarse de en medio a los de mayor experiencia ya que cobraban diversos pluses y así reducir gastos.
Además más adelante, despidieron a gente joven de las rotativas de periódicos y contrataron a una empresa externa para dedicarse a esa tira de periódicos.

¿Cómo se encuentra laboralmente en la actualidad?
  -En paro pero cobrando año a año, como he dicho anteriormente, la indemnización que me corresponde.

IES Luis Braille

Alejandro Clemente Fernández

Mi padre fue despedido por despido colectivo en la empresa de construcción

La persona que escogí para hacer la entrevista fue mi padre ya que a él le despidieron de una empresa de hormigón hace 4 años  y me parecía la persona más indicada para hacer la entrevista. La primera pregunta de la entrevista fue.
Fuente: Wikimedia Commons


1.     ¿Tus jefes te avisaron del despido con 15 días de antelación?
Me contesto que no,  fue al instante.
2.     ¿Cuántos trabajadores despidieron en tu empresa?
Me contesto que ha muchas personas le despidieron igual que a él.
3.     ¿Qué motivos llevaron a tu jefe a despedirte?
Me contesto que los despidos fueron porque sobraba gente en la empresa y que no había suficiente trabajo en ella.
4.     ¿Cómo fue el despido?
Me dijo que fue al instante, que su jefe vino y le dijo que tenían que echar a gente de la empresa porque no había trabajo en ella y le tenían que echar  porque era una de las personas más antiguas de la empresa y tenían que renovar al personal.
5.     ¿Recibiste indemnización por parte de la empresa?
Me dijo que si que recibió una indemnización de 45 días por año
6.     ¿Acudiste al SMAC a denunciar a la empresa?
Me contesto que no denuncio a la empresa
7.     ¿En tu finiquito te cobraron las partes que te debían?
Me contesto que si le habían pagado las partes que le debían como  las vacaciones.
Esa fue toda la entrevista por mi parte y la de mi padre.
I.E.S Luis Braille 
David Cobo de la LLana

Dificultad Financiera. 1ºBachillerato. I.E.S Santa Teresa de Jesús

Dificultad financiera
Situación real
Ana tras volver de vacaciones en 2010, recibió una llamada del director de la entidad financiera; este intentó convencerla para depositar al 7% de interés mensual, (un interés que llevaba buscando meses y que le parecía una broma) los ahorros de su madre, una mujer de ochenta años, que eran de una cifra de treinta mil euros que había ahorrado durante toda su vida, cuidando a niños y limpiando casas, para cualquier imprevisto. Ana le dijo que le diera tiempo para pensarlo y hablarlo con su madre.
A la semana siguiente, Ana llamó al número personal del director y le comunicó que lo quería aceptar. Concretaron una cita para que ella pudiera tener toda la información, el director le dijo que podría retirarlo cuando quisiese sin ningún tipo de problema. Ana terminó de convencerse y aceptó. Los beneficios empezaron a verse en las cuentas, ella estaba muy orgullosa de lo que había conseguido. Pero en el 2011, Ana acude al banco para pedir un préstamo para poder comprarse un coche, y al denegárselo le pidió a su madre que le prestase el dinero, la madre acepto encantada. Pero cuando fue a la entidad financiera y quiso retirar el dinero le dijeron que no podía que había comprado preferentes de perpetuidad. Ana impresionada afirmó que ella no ha firmado ningún tipo de documento  ya que se lo tramitó su amigo Fernando que en ese momento era el director de la sucursal bancaria.
Ana quiere ir a la policía y denunciar la presunta estafa que le habían hecho, pero le da vergüenza decirle a su madre y a sus hermanos que le han estafado y que posiblemente perdiesen todo ese dinero, por lo que acude al defensor del pueblo y se une a asociaciones de perjudicados.
En 2012, el actual director de la sucursal bancaria Raúl, llama a Ana y le dice que quiere verla en su casa, que tiene su contrato, pero que solo se la entregaría si firmaba un documento en el que aceptaba su conocimiento sobre las preferentes. Ella aceptó y firmó la carta, pero con un matiz al lado de su firma. Puso que no estaba conforme con lo que estaba leyendo y consigue el presunto contrato. La firma no era la de su madre solamente era una falsificación que se le parecía.
Al día siguiente Raúl vuelve a llamar a Ana, se ha dado cuenta de que ese documento no vale, por lo que le ofrece cambiar las preferentes por convertibles, pero ella se niega. Por lo que Raúl la convence para ir a la central de la entidad. Allí le explican que el 2014 las convertibles se podrán convertir en acciones, las cuales podrá vender, pero ella se niega, quiere sus treinta mil euros.
A final de 2012 su madre fallece, el testamento recoge que esos treinta mil euros deben ser entregados por partes iguales a sus dos hijos. Por lo que con el documento acuden al banco y el director de la entidad les da un préstamo que será devuelto con la venta de las preferentes. Pero con una condición que quiten las denuncias interpuestas a la entidad y que todo este incidente no se lo contasen a nadie. Ana y su hermano aceptaron, lo que más feliz le hizo a Ana era que su madre había fallecido tranquila sin saber lo que estaba pasando alrededor de su dinero.
El astuto zorro
Un día Ana una preciosa ardilla, iba paseando por el bosque cuando se cruzó con un antiguo amigo el conejito Fernando. Este la vio cargada de bellotas y le dijo que él podía guardárselas todo el tiempo que ella quisiese y que además irían aumentando de cantidad según pasase el tiempo, Ana se puso muy feliz, ya que llevarlas todo el día a cuestas no le gustaba. Pero Ana le dijo a su amigo el conejito tenía que decírselo a su madre, ya que las bellotas no eran suyas si no de su madre, ella solo se encargaba de cuidarlas y transportarlas porque su madre era demasiado mayor para hacerlo ella.
Al llegar a casa Ana se lo dijo a su madre y ella acepto muy feliz de poder quitarle esa carga a su hija. Al día siguiente Ana salió corriendo en busca del conejito Fernando y al encontrarle le dijo que su madre le gustaba mucho la idea. Tras darle todas las bellotas, Ana corrió tranquila con el resto de su familia.

Al cabo de un tiempo las bellotas dejaron de crecer en los arboles, por lo que la familia estaba hambrienta. Ana fue en busca del conejito Fernando, pero el ya no se encargaba de sus bellotas sino se encargaba el zorro Raúl. Este le dijo que no podía darle las bellotas, que ella se las había dado a el por mucho tiempo y que ese periodo no había acabado y nunca acabaría. Ana enfadada no podía hacer nada, por lo que se fue a casa y dijo que no había encontrado a Fernando al resto de su familia.
Ana hablo con los demás animales de su ciudad, a muchos les pasaba lo mismo. Enfadada volvió a ver a Raúl pero este le dijo que no se las iba a dar de ninguna manera. Por lo que Ana siguió intentando encontrar una solución, pero no veía ninguna.
Al cabo del tiempo Raúl fue a hablar con Ana y le dijo que  su madre había firmado una hoja de pino aceptando que las bellotas las daba permanentemente no por el tiempo que ella quisiera, Ana quedó enfadada y descolocada ya que no sabía nada de ese documento, le pidió que se lo entregase, pero Raúl era un zorro muy astuto, por lo que le pidió que antes firmase una hoja de pino donde aceptaba que ella sabía todo lo que iba a pasar con sus bellotas, pero ella mas lista que él,  no firmo con la mano derecha sino con la izquierda sin que el lobo se diese cuenta, por lo que esa hoja no valía para nada. Al ver la supuesta hoja firmada por su madre, se dio cuenta que esa no era la mano de su madre, por lo que se enfado mucho mas y fue en busca de Raúl para encontrar una solución. Este le dijo que podría darle sus bellotas si aceptaba bastantes menos, ya que en ese momento  no tenía todas las que ella le había dado, ella se negó, quería todas las bellotas y toda perfectas. Entonces Raúl se negó y salió corriendo, Ana intento perseguirle, pero el corría mucho mas.
Ana muy triste llegó a su casa y su hermano le dijo que su madre había fallecido, y que había un documento que tenía su tía en el que decía que las bellotas eran para ellos, asique acudieron al zorro y este se las dio pero con una condición que no le dijeran a nadie que había pasado, ni nada malo sobre su negocio, ellos aceptaron y se fueron con sus bellotas a casa muy felices.
Marina Mora Martin 1ºBachillerato P
I.E.S Santa Teresa de Jesús

Fuente de la imagen: Wikimedia Commons

Inversión equivocada vs Inversión acertada. Una inversión con final feliz


Inversión equivocada Vs Inversión acertada
Una inversión equivocada
Marta era una joven de 23 años cuya abuela acababa de fallecer, como ella era su única nieta heredó una cantidad de 12.000 euros. Un dinero que su abuela había ahorrado durante toda su vida trabajando  por la mañana de costurera en una pequeña mercería de barrio y por la tarde en un restaurante. Cuando supo que era la heredera de esa cantidad de dinero, lo primero que se planteó fue cómo invertirlo, ya que lo que ella quería era sacar el máximo rendimiento de ese dinero. Por lo que visitó cientos de bancos buscando el  que más interés le ofreciese, hasta que dio con un pequeño banco de su ciudad.
Marta mantuvo una entrevista con el director financiero, ella  le dijo que lo que quería era obtener más cantidad de dinero en muy poco tiempo, ya que deseaba poder independizarse y pagarse el último año de carrera con este dinero y sin ningún tipo de ayuda de sus padres,  por lo que el director de la sucursal le hizo unas preguntas rutinarias. Marta  respondió a ellas sin ningún tipo de problema, comentándole a la vez que ella no tenía ni idea de inversiones y que no se había informado sobre el tema. Por lo que al director  se le puso una sonrisa en la cara y le dijo sin ningún cargo de conciencia: "no te preocupes ya he encontrado la inversión ideal para ti". Marta muy contenta e ilusionada le preguntó el tipo de interés que iba a recibir mensualmente, y al escuchar el porcentaje se quedó boquiabierta, era el más alto que le habían propuesto hasta el momento.
Marta decidió irse a casa y hablar con su padre sobre esta cuestión. Pero al llegar a casa se dio cuenta que su padre se había ido a trabajar una semana a la capital de Alemania, Berlín. Desilusionada fue a su madre y le comentó todo lo que había hecho esa mañana y su  madre al enterarse de esa oferta le dijo que seguro que  "había gato encerrado", que esperase a que su padre volviese y así podría decirle qué estaba firmando en realidad. Pero Marta se enfadó mucho, ya que pensaba que su madre le llevaba la contraria porque el dinero no fue para ella si no para Marta. Por lo que salió corriendo por la puerta y se fue a casa de una amiga.
Cuando llego a casa de su amiga Elsa, ésta la recibió con una fuerte abrazo ya que llevaban mucho tiempo sin verse debido a que ambas estaban estudiando carreras muy distintas ( Medicina y Magisterio) y por lo tanto al no tener tiempo porque tenían que estudiar y al no verse en clase se habían distanciado un poquito. Marta estaba llorando cuando Elsa le abrió la puerta, al verla así Elsa se preocupó mucho, nunca la había visto tan frustrada como ese día. Empezaron a hablar mientras preparaban algo que comer y Marta le contó todo lo que le había pasado a su abuela y como había estado buscando la inversión ideal, por lo que Elsa le recomendó sin tener ni idea de economía que firmase la última que le habían ofrecido, y así hizo.
Cuando terminaron de comer fue directa al banco y firmó el contrato. El dinero iba aumentando según pasaban los meses, pero al cabo de un año empezó a ver problemas, perdió más de la mitad del dinero. Asustada acudió a su padre y éste le dijo que había invertido con un rendimiento muy alto pero a la vez con un riesgo igual. Marta desilusionada extrajo todo lo que pudo de esta inversión y no pudo independizarse y se tuvo que poner a trabajar para poder pagarse el último año de carrera.
Una inversión con un final feliz
Marta era una joven de 23 años cuya abuela acababa de fallecer, como ella era su única nieta heredó una cantidad de 12.000 euros. Un dinero que su abuela había ahorrado durante toda su vida trabajando  por la mañana de costurera en una pequeña mercería de barrio y por la tarde en un restaurante. Cuando supo que era la heredera de esa cantidad de dinero, lo primero que se planteó fue cómo invertirlo, ya que lo que ella quería era sacar el máximo rendimiento de ese dinero. Por lo que visitó cientos de bancos buscando el  que más interés le ofreciese, hasta que dio con un pequeño banco de su ciudad.
Marta mantuvo una entrevista con el director financiero, ella  le dijo que lo que quería era obtener más cantidad de dinero en muy poco tiempo, ya que deseaba poder independizarse y pagarse el último año de carrera con este dinero y sin ningún tipo de ayuda de sus padres,  por lo que el director de la sucursal le hizo unas preguntas rutinarias. Marta  respondió a ellas sin ningún tipo de problema, comentándole a la vez que ella no tenía ni idea de inversiones y que no se había informado sobre el tema. Por lo que al director  se le puso una sonrisa en la cara y le dijo sin ningún cargo de conciencia: "no te preocupes ya he encontrado la inversión ideal para ti". Marta muy contenta e ilusionada le preguntó el tipo de interés que iba a recibir mensualmente, y al escuchar el porcentaje se quedó boquiabierta, era el más alto que le habían propuesto hasta el momento.
Marta decidió irse a casa y hablar con su padre sobre esta cuestión. Pero al llegar a casa se dio cuenta que su padre se había ido a trabajar una semana a la capital de Alemania, Berlín.
Desilusionada fue a su madre y le comentó todo lo que había hecho esa mañana y su  madre al enterarse de esa oferta le dijo que seguro que  "había gato encerrado", que esperase a que su padre volviese y así podría decirle qué estaba firmando en realidad. Pero Marta se enfadó mucho, ya que pensaba que su madre le llevaba la contraria porque el dinero no fue para ella si no para Marta. Por lo que salió corriendo por la puerta y se fue a casa de una amiga.
Cuando llegó a casa de su amiga Elsa, esta la recibió con una fuerte abrazo ya que llevaban mucho tiempo sin verse debido a que ambas estaban estudiando carreras muy distintas ( Medicina y Magisterio) y por lo tanto al no tener tiempo porque tenían que estudiar y no verse en clase se habían distanciado un poquito. Marta estaba llorando cuando Elsa le abrió la puerta, al verla así Elsa se preocupo mucho, nunca la había visto tan frustrada como ese día. Empezaron a hablar mientras preparaban algo que comer y Marta le conto todo lo que le había pasado a su abuela y como había estado buscando la inversión ideal, por lo que Elsa le dijo que si quería podía llamar a su marido y que seguro que la podría ayudar, ya que en ese mismo año había terminado de estudiar economía.
Cuando llegó Carlos y leyó el contrato de arriba abajo le preguntó a Marta lo que ella quería, si uno con más rendimiento y mucho riesgo o una con menos rendimiento y muy poco de riesgo. Marta extrañada le dijo que quería menos riesgo aunque tuviese menos rendimiento, por lo que Carlos le dijo que ese contrato era todo lo contrario, que seguramente perdiese más de la mitad del dinero, Marta muy contenta le dio un abrazo y le dio las gracias, y se fue a su casa a pedir perdón. Y tras unos días encontró la inversión que necesitaba.
Marina Mora Martín 1ºBachillerato P
I.E.S. Santa Teresa de Jesús

Dificultad: situación real.



SITUACIÓN REAL: Situación a desarrollar: un hombre ha pedido prestado dinero a un prestamista local. Tras llegar la crisis, el hombre vio cómo su negocio perdía progresivamente clientes, hasta llegar al borde de la quiebra. Ahora se enfrenta a la obligación de este préstamo y sus intereses por parte del acreedor, que no le perdona ni un plazo del mismo.

ATADO
-¡No, por favor! ¡Deteneos, por favor!
-Los sollozos no sirven de nada, Somoza. O pagas a Hesh, o volvemos mañana.
Los tres gorilas salieron tranquilamente del establecimiento, dejando al sastre postrado de rodillas entre lágrimas. Los alfileres, tirados por el suelo en una posición azarosa sobre muchas de las viejas telas a las que la caída había quitado el polvo. Incluso había alguna que otra tijera clavada en las múltiples cajas que albergaban hilos y más agujas.
Se levantó, poco a poco. Meditando cuál iba a ser su siguiente paso. Llamar a la policía, quizás. Pero no. No necesitaba eso. El judío era capaz de enviar a sus matones a por su ex-mujer, y, aunque separado de ella, no quería eso.
Quién le mandaría meterse en ese lío con aquel maldito narigudo. Quizás esos vientos buenos que soplaban hacía ya bastante, silbando en sus orejas promesas de mejores tiempos, mejores que los que ya estaba viviendo, con gente entrando y saliendo de su sastrería, encargando trajes, faldas, camisas, y cualquier otra cosa que les fuera necesaria.
Solo era un pequeño crédito. El judío era un antiguo conocido suyo, siempre dispuesto a ofrecer dinero para cualquier contratiempo, como él decía. Nunca aceptó, hasta que una noche, después de consultarlo con la almohada y con Gina, decidió pedirle una pequeña cantidad. 20.000 $. No tardaré mucho en devolverlo, en cuanto abra la otra tienda y obtenga ganancias, tendrás tu dinero sobre la mesa; pero no te preocupes, tarda lo que tengas que tardar, yo no tengo prisa en tenerlo de vuelta, dijo él. Claro que no. Con semejantes intereses…
Todo fue bien al principio. Al principio de la crisis incluso. Desaceleración, no crisis, decía el ejecutivo. Daba igual, había gente en sus dos tiendas. Qué más daba.
Después ya no hubo gente en la segunda. Tuvo que cerrarla, aunque ya casi había devuelto todo el préstamo. Solo restaban los intereses. No te preocupes, dijo de nuevo, es comprensible, baches hay en todos lados.
Tras poco tiempo, tuvo que despedir a sus dos ayudantes de la primera tienda y prescindir del sueldo de su mujer, a quien pagaba por esas horas de ayuda en la trastienda. La gente dejaba de entrar con tanta afluencia en su tienda, y la caja registradora no inundaba con su sonido metálico la tienda más.
Llegó el divorcio. El acoso constante de su acreedor, que le instaba a pagar sus deudas, que solo se componían de intereses ahora.
Y ahora esto. Y un día de plazo. ¿Qué iba a hacer? No tenía el dinero.
Él solo quería ser conocido. Dos tiendecitas. Nada más.

A la mañana siguiente, el judío entró en la tienda. Un traje blanco y un bastón con empuñadura dorada. El sombrero se le descolocó cuando vio el cuerpo de su deudor colgando del techo.
Debajo, en un trozo de papel sucio, escrito, "y los sueños al final, no sirven más que para acabar jodido".
El judío supuso que ya no habia manera de decirle que le perdonaba parte de los intereses de la deuda.


                 ERICK FERNANDO MACÍAS COBOS
                 CURSO: 1º N bachillerato
                 IES Santa Teresa de Jesús