Inversión Sin Fondo
1ª parte
Había una vez tres amigos Miguel, Raúl y Sergio que habían estudiado economía en la misma Universidad y se conocían desde que eran pequeños, por lo que ya había confianza entre ellos tres. A Raúl se le ocurrió la idea de reunir 3.000 euros entre los tres e invertir en letras del tesoro de la República Democrática del Congo, país que ofrecía una rentabilidad tan alta que hacía pensar sobre los motivos por los que había gente que hubiera invertido o esté invirtiendo comprando su deuda pública. Raúl consiguió convencer a sus amigos, a pesar de que sabían que una rentabilidad muy alta conlleva un mayor riesgo y menor liquidez. Lo hicieron y firmaron que el gobierno congoleño se lo devolvería al cabo de un año, que era el plazo mínimo. Al principio, se mantenía una estabilidad económica, por lo que la inversión parecía buena, a los seis meses el país mejoró considerablemente su política económica, así que Miguel comenzó a hacer planes con el dinero que iban a conseguir, que era el triple de lo invertido, es decir, 9.000 euros, que se tendría que repartir entre los tres amigos. Miguel pensó en renovar todo los muebles de su casa, por lo que comenzó a comprar todo financiado hasta que el gobierno congoleño les devolviese el dinero con los intereses acordados. Todo iba bien hasta que de repente dos meses antes de la fecha fijada para que les devolviesen el dinero hubo una recesión económica, por lo que el gobierno congoleño no pudo hacer frente al pago de su deuda. Recuperaron poco menos del dinero invertido y Raúl tuvo que devolverles el dinero a sus amigos, porque fue culpa suya perder el dinero en una inversión que con una liquidez mínima y un riesgo demasiado alto.
2ª parte
A Sergio un día se le ocurrió invertir en un fondo de inversión durante un periodo de tiempo corto en el Banco Santander Central Hispano en los fondos tándem 0-30, fondo de inversión que ofrece una inversión mayoritariamente en Renta Fija y, en menor medida, en Renta Variable de Europa y OCDE entre el 0% y el 30%, así que Sergio se lo contó a sus amigos Miguel y Raúl que habían quedado tocados con las inversiones debido a lo ocurrido anteriormente con el gobierno congoleño. Decidieron volver a invertir su dinero, pero esta vez igual que Sergio, ya que después del incidente comenzaron a ser más aversos al riesgo, y comenzaron a preferir tener una menor rentabilidad, pero mayor liquidez y poder recuperar su dinero cuando lo necesitaran. Después de un periodo de tiempo el dinero invertido aumentó notablemente y pudieron recuperar su dinero junto con los intereses acordados con el banco. Miguel y Raúl agradecieron mucho a Sergio que se lo hubiera dicho y poder así conseguir dinero y que la inversión en compra de deuda pública del estado congoleño no fuera más que una anécdota.
Humberto Parrales Rivas 1º Bachillerato P IES Santa Teresa de Jesús
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